
La planificación estratégica es el proceso de documentar y establecer la dirección de la empresa, mediante la evaluación de dónde se encuentra y hacia dónde se dirige. El plan estratégico registra la misión, visión y valores, así como los objetivos a largo plazo y los planes de acción que utilizarás para alcanzarlos. Un plan estratégico indica cuál es la mejor manera de responder a las oportunidades y desafíos, por lo tanto, desempeña un papel fundamental en el crecimiento y el éxito de una empresa.
La planificación estratégica es un proceso y, por lo tanto, tiene insumos, actividades, productos y resultados. El resultado final es la estrategia de la organización, que incluye un diagnóstico del entorno y la situación competitiva, una política rectora sobre lo que la organización pretende lograr e iniciativas clave o planes de acción para lograr esta política.
A veces, es fácil confundir un plan estratégico con un plan de negocios. La diferencia principal entre ambos es el enfoque: un plan estratégico se enfoca en toda la organización, mientras que un plan de negocios suele enfocarse en un producto o servicio en particular.
Beneficios de la planificación estratégica
El proceso de planificación estratégica puede llevar algún tiempo, pero es beneficioso para todos los involucrados. Estos beneficios incluyen:
- Define claramente el propósito de la organización y establece metas y objetivos realistas consistentes con esa misión.
- Ayuda a formular mejores estrategias utilizando un enfoque lógico y sistemático.
- Comunica las metas y objetivos a los integrantes de la organización.
- Asegura que se haga el uso más efectivo de los recursos de la organización al concentrarlos en las prioridades clave.
- Aumenta el compromiso de los empleados
- Proporciona una base desde la cual se puede medir el progreso.
- Proporciona un enfoque más claro para la organización, produciendo así una mayor eficiencia y eficacia.
- Minimiza los riesgos.
- Aumenta la productividad a partir de una mayor eficiencia y eficacia.
- Resuelve los principales problemas de la organización.
Herramientas para la planificación estratégica
En la planificación estratégica se utilizan diversas herramientas y técnicas analíticas. Estos fueron desarrollados por empresas y firmas de consultoría Algunos ejemplos de estas herramientas incluyen:
- Análisis PEST: cubre factores externos tales como políticos, económicos, sociales y tecnológicos (PESTEL agrega ecológico/ambiental y legal / regulatorio).
- Cuadro de mando integral y mapas estratégicos: crea un marco sistemático para medir y controlar la estrategia de la organización.
- Análisis de las cinco fuerzas de Porter: aborda el atractivo y la rivalidad de la industria a través del poder de negociación de compradores y proveedores y la amenaza de productos sustitutos y nuevos participantes en el mercado.
- Análisis FODA: aborda las fortalezas y debilidades internas en relación con las oportunidades y amenazas externas.
Pasos para una planificación estratégica exitosa
Por lo general, se considera que el desarrollo y la ejecución de la planificación estratégica consiste en los siguientes pasos críticos:
1. Evaluar las tendencias de la industria, la competencia y los clientes
En el proceso de planificación estratégica, una empresa evaluará primero la situación del mercado en el que está operando o desea operar. Debemos preguntarnos:
- ¿Qué tan grande es la industria?
- ¿Qué tan rápido está creciendo?
- ¿Quiénes son los competidores clave?
- ¿Qué tan bien financiados están?
- ¿Qué movimientos están haciendo?
- ¿Cuáles son las tendencias de precios?
- ¿Qué productos o servicios piden los clientes?
- ¿Existe alguna tendencia macroeconómica en juego?
- ¿Existe algún problema de regulación gubernamental?
2. Realizar un análisis FODA de su empresa
Un análisis FODA sirve para realizar un análisis interno de la empresa y evalúa críticamente las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas de la organización. Es importante tener en cuenta que el análisis FODA no es la única herramienta que se puede usar en este proceso pero es una de las más populares.
Ejemplos de Fortalezas:
- personal
- base de clientes
- posición en el mercado
- recursos financieros
- canales de venta
- productos
- rentabilidad
- crecimiento
Ejemplos de Debilidades
- en su personal
- posición en el mercado
- márgenes
- recursos financieros
- vulnerabilidad competitiva
- productos faltantes
- quejas de clientes
- canales de ventas faltantes
Ejemplos de Oportunidades
- ingresar a mercados complementarios
- formar alianzas estratégicas
- recaudar fondos
- lanzar nuevos productos
- realizar fusiones y/o adquisiciones
Ejemplos de Amenazas
- caídas en la economía,
- pérdida de personal clave
- falta de recursos financieros
- flujo de caja limitado
- caída de precios
Como resultado del análisis, sabremos o decidiremos en qué planes o mercados debemos enfocarnos o abandonar o cómo asignar mejor los recursos de la empresa.
3. Definir misión y visión
Una vez realizada la evaluación externa e interna, se debe elaborar la declaración de misión y visión de la organización.
La declaración de misión habla de «¿por qué existimos?». Mientras que la declaración de visión habla de «qué estamos ofreciendo y hacia dónde vamos». Todas las buenas declaraciones de visión deben ser cuantificables y estar limitadas en el tiempo.
4. Definir los objetivos comerciales corporativos
Ya sabiendo hacia dónde nos dirigimos,y a qué nos enfrentamos desde una perspectiva de la industria y la competencia, ahora estamos en condiciones de comenzar a profundizar en los objetivos comerciales específicos que nos permitirán lograr nuestra visión.
Los objetivos comerciales son los resultados específicos que estás tratando de lograr. Esto podría incluir cosas como:
- cambios en la oferta de productos
- estrategias de marketing y ventas
- recursos financieros
- eficiencia operativa
- cultura de los empleados
- objetivos financieros
Es decir, qué cosas deben suceder para hacer realidad su visión.
5. Profundizar en los objetivos a nivel de departamento
Ahora debemos decidir qué objetivos e iniciativas específicas debemos implementar para ayudar a la empresa a lograr cada uno de sus objetivos comerciales.
Esto se hace estableciendo objetivos específicos para el equipo de producto, ventas y marketing, operaciones, tecnología, finanzas y recursos humanos. Por ejemplo, un objetivo comercial podría ser «mejorar la moral de la empresa» y un objetivo específico del departamento de recursos humanos para apoyar ese objetivo podría ser «lanzar nuevos beneficios para los empleados».
Para establecer tus objetivos puedes usar la metodología SMART.
6. Determinar las necesidades de personal, presupuesto y financiación
Una vez que se hayan definido y cuantificado todas las necesidades departamentales, ahora puedes agregarlas en un plan corporativo, una estructura organizacional y un presupuesto centralizados. Si no tienes todos los recursos financieros necesarios para lograr el plan, tienes una de dos opciones:
- reducir los objetivos a un nivel que puedas pagar más fácilmente
- reunir el capital necesario para que puedas lograr tu plan completo
7. Implementación de la estrategia
Hasta este punto ya deberíamos tener formulada una estrategia completa y hemos tomado en cuenta los recursos necesarios para ejecutarla.
Ahora debemos comunicar claramente la estrategia elegida a toda la empresa y lograr que todos sus empleados pongan la estrategia en acción.
La implementación efectiva de la estrategia implica:
- el desarrollo de una estructura sólida para implementar la estrategia
- maximizar la utilización de los recursos disponibles
- reorientar los esfuerzos de acuerdo con las metas y objetivos de la estrategia.
8. Evaluación de la estrategia
Después de la fase de implementación, es importante evaluar el desempeño de la estrategia elegida. La evaluación de la estrategia involucra tres actividades cruciales:
- revisar los factores internos y externos que afectan la implementación de la estrategia
- medir el desempeño de las actividades realizadas
- tomar medidas correctivas para hacer que la estrategia sea más efectiva
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